EL PAÍS. Si no te gustan tus amigos... ¡cambialos!

Nada como este gobierno para fomentar el viejo dicho de "año nuevo, vida nueva". Y lo que pasa es que uno no puede tomarse vacaciones, porque te pueden colar un estatuto de por medio. El caso es que Zapatero, que no lee ABC, pero se lo cuentan, ve con horror estar 10 puntos por debajo en una encuesta. No del CIIS, que esas son de chiste, una pleitesía (al gobierno) o pitorresía ( hacia los votantes. Esta encuesta venía cargada con TNT y no añade nada nuevo: las amistades de ZP le cuestan caro.

Tonto no es (del todo), así que el cambio de aliados se impone, y además en un momento delicado: la recta final del Estatuto de Cataluña. Un estatuto en el que, tanto ERC como CIU han pugnado por ser el partido más radical en la carrera por un "estatuto mejor". La estrategia era evidente: pedir la luna "para ver qué nos dan en Madrid". Y Zapatero se la ha jugado a Carod-Rovira. Con los presupuestos para 2006 aprobados, eso sí.

Debe de doler. Puigcercós y Carod-Rovira han sido los "protas" durante todo el proceso. Han llevado su Estatuto a Madrid (no el de Maragall, no pequemos de ingenuos) y ahora Artur Mas se lleva el merito... ¿les parece extraño que amenacen ahora con votar en contra? A mi no.

En cambio, Artur Mas está en su mejor momento. Después de hacer una oposición sucia en Cataluña, después del escándalo del 3% durante la crísis del Carmelo, se hace el "amigo" con tal de tener un estatuto nuevo... y cuando parece que no se va a llegar a un acuerdo, coge a Zapatero por banda y chuta a gol...

Mas, y esto ya lo dijimos aquí, es idiota. Ha echado sus cartas sobre la mesa demasiado pronto, aunque se le veía venir. El estatuto daba igual, pero desgastar a ERC, no. Ese es el objetivo, y a Zapatero le da igual uno que otro, con tal de quedarse afincado en la Moncloa.

Ya veremos, pero me da que ya no le salen las cuentas y que el ocaso zapateríl ya no es más que cuestión de paciencia. Rajoy lo ve, y por eso no da la puntilla... no hace falta.