Saturday, November 12, 2005

Struggling to keep it together (week 14)

Keeping it up with the Update. This weekend at last with some sports ahead. It hasn't been a very fruitful week. Proof of that is the lack of relevant news from Argentina. But in other countries, such in Italy, we've turned to face a rather serious problem within Berlusconi's media trust: an open revolt of the sports board after a local showman, Paolo Bonolis, called Ettore Rognoni, the director of such board "Er penombra", which could be translated into "nobody special".

Well, Bonolis has left the building, and will know how to keep his big mouth shut. But there's more from Italy, as a report from the state television RAI unveiled that the Marines used phosphore bombs in Faluja, when the city was rocked by Muqtada Al-Sadr. That kind of weapon is banned by one of the Geneva conventions, as it is basically like Napalm, only it does not burn buildings, only flesh.

The issue to face is that few American media, theoretically independent had not reflected this in their pages. Censorship? Untrust towards the Italian? Who knows...

And in Spain, Zapatero's government is still alive. That despite a highway that was being built in the south fell to pieces, killing several workers in the way. The scandal was aggravated when some documents linked to the highway were found in a dump. Obviously these guys are more than dirty but nobody seems to realize how dangerous they are...



I'm Miguel Vinuesa and this is news to me!

Cine: Match Point

MATCH POINT
Estados Unidos / Inglaterra, 2005. C-124’. Drama. Director: Woody Allen. Intérpretes: Scarlett Johansson, Jonathan Rhys-Meyers, Emily Mortimer, Matthew Goode, Brian Cox, Penelope Wilton. Distr.: On Pictures. CE: Mayores de 18 años. VM: Adultos. VA: HHHH

Match point narra la dramática historia del ascenso en sociedad de un joven profesor de tenis (Jonathan Rhys-Meyers) y de las terribles consecuencias de su ambición. El protagonista se debate entre dos mujeres y al no hallar una salida opta por una solución desesperada. La película cuenta con un reparto inglés —prácticamente en su totalidad— y está ambientada en la sociedad de las clases altas inglesas. Ha sido filmada, por primera vez, fuera de Nueva York.

Woody Allen repite sus temas y varía algo sus modos, pero esencialmente no cambia nada. Puede que sorprenda a primera vista en Match point no encontrarnos al propio cineasta interpretando el papel de marginado protagonista, o no hallar en ella los diálogos chispeantes que se han desprendido de varias de sus ingeniosas creaciones, por ejemplo, La maldición del escorpión de Jade o Un final made in Hollywood.

Tras algunas cintas producidas en los últimos años con cierto automatismo, y habiendo dejado grandes trabajos en la memoria de los espectadores, regresa ahora con una comedia trágica de gran calidad. Tal vez Match point esté más cerca de Delitos y faltas que de ninguna otra de sus películas. Como aquella, ésta es una pieza filosófica, dedicada a transmitir una idea: la suerte viene y va. El tenis es a la vez la metáfora y el contexto perfecto para complicar la vida a sus jóvenes y ricos protagonistas, brillantemente interpretados por Jonathan Rhys-Meyers y Scarlett Johansson.

Aunque la película tiene un tono serio, Match point ofrece dosis de humor subterráneo constante, con agudas frases que quedarán grabadas en la conciencia del espectador. Lo que no pudo hacer con Melinda y Melinda, es decir, encadenar dos películas en una, lo hace ahora: la primera parte de Match point es una deliciosa comedia romántica de altos vuelos, con jóvenes neuróticos y seductores. La segunda adopta los tonos trágicos de Strindberg y la fatalidad, muy del estilo de Dostoievski, que arrasa a los personajes. Todos los elementos “Allenianos” regresan en esta película: amores, flirteos, culpa, ausencia de redención y justicia... Y, sin embargo, Woody se ha renovado. Ópera en lugar de jazz, una imagen limpia y relajada, una Inglaterra mistificada en lugar de Manhattan.

Match point es una grandísima cinta que genera tensión y frenesí. Es bella y mordaz a la vez, y tiene auténticas reminiscencias de Hitchcock, de Extraños en un tren, en concreto, y de la Lolita de Kubrick. Está magistralmente interpretada y rodada de manera sensacional, tiene una puesta escena muy realista y luminosa —con una voz en off que plantea la tesis del filme—, y un ritmo muy bien llevado, hasta que la atmósfera se troca paulatinamente en la viva recreación de un thriller claustrofóbico. Nos queda Allen para rato.

José Luis Panero

That Bloody phosphore of yours

With little development in the USA, this week is been unveiled that US forces counter-attacked with Phosphore bombs in Falluja, during Muqtada Al-Sadr's open revolt. Such weapons are forbidden by the Geneva Convention that regulates the use of chemical weapons. Plus, we had to learn this from the Italian state television, the RAI.

This is another evident sign that, if you have to look for criticism, better think twice before echoeing a foreigner's view. When it comes to news, it is rather unfortunate that a major newspaper like the Washington Post don't pay any attention to it in their pages, and it's been the case with this new so-called scandal that made left-wingers, anti-americans and all that kind of mob come together in the repulse to the Iraq war.

I'd even say, and I can't blame the public opinion for not backing me up, that the view of patriotic american media is getting obsolete. We've seen it this week in California with the rejection of most of the bills Governor Schwartzenegger -Ah! Can anyone spell it right?- tried to pass. We've seem it when the only victory for the Republican Party this week is Michael Bloomberg, a "democrat in Republican dresses".

To censor, like it's been done, the italian documentary and treat it as non-serious information , As it showed bodies burnt out by phosphore seems to me illogical in a free society. I'll repeat tirelessly the idea that the people have the right to know. But if they don't, believe me, they're going to grow tired of a government that keeps burrying information. It's bad, definitely, to know such things have happened, but it's way worse to hide them under the carpet pretending they don't exist.

And that is because problems tend to surface...

Miguel Vinuesa

EL PAÍS: Fatiga de materiales

El Ministerio de Fomento tiene sus pros y sus contras pero desde que Magdalena Álvarez y sus "planes Galicia de Mierda" lo rigen, está de capa caída. ¡Ya ni siquiera podemos librarnos de documentos como es debido! Se conoce que se los darían a Anacleto y como el hombre está un poquito desfasado, eso de las trituradoras le suena a Chino. Y digo mal, porque los chinos habrían hecho desaparecer esos documentos con bastante mejor eficiencia que estos tuercebotas de Fomento.

La semana, desde luego, ha sido un ir y venir de declaraciones, y una vez más el PP ha perdido la oportunidad de coger un hierro oxidado y sacarle las tripas a Zapatero, que por cierto, está viendo a un psiquiatra. El dato me llega de muy buena tinta. Tanto que, si se asoma, puede morir. Ya saben como hacen estos socialistas las cosas. Al Gal me remito.

Y el PP ha perdido su oportunidad porque, una vez más está arrinconado. Si la política española fuera lucha libre, así, al estilo americano, bien espectacular, Rajoy estaría atado a uno de los postes mientras todos los demás le dan hasta hartarse. Un Rajoy a la defensiva, lógicamente, no puede morder como debería, porque este asunto no es que sea gordo. Es que ha costado vidas.

La imprudencia de unos ineptos, que no adeptos, del ministerio que se supone mantiene este país a flote, y un exceso de subcontrataciones sin ningún tipo de vigilancia ha supuesto que unos pobres obreros mueran, y lo único que se le ocurre decir al Ministro Caldera es que "es por la fatiga de materiales".

Y al final uno se da cuenta de que estamos todos tontos. No nos echamos a la calle a pedir la dimisión de una acomplejada como Maleni ni crucificamos a Caldera por semejante falta de respeto por las vidas de los obreros muertos.

Anda, Zapatero. Danos más pan y circo. Danos más Canal Cuatro

CORRIERE: Battaglie mediatiche

È stata l'ultima mossa di questo singolare showman, un pò Milanese, un pò Romano, ma sempre comico. Se almeno avesse dato un certo senso alla sua carriera, non sarebbe finito così, uscendo in una maniera abbastanza deprimente. Difatti, Bonolis si pot va risparmiare critiche acide, troppo acide verso una persona rispettata come Rognoni e permettersi di chiamarlo "er penombra".

Si tratta, basicamente, di non far diventare le faccende personali. Se ci pensi due volte, è piuttosto facile. Prendete Ezio Greggio e gli amici di Striscia la Notizia. Sono anni che criticano tutti, ma propio tutti, con un' eleganza che, purtroppo, né Paolo Bonolis ne io stesso abbiamo, e mi confesso rabbiosamente, ma anche sanamente invidioso.

Comunque, il fatto più sorprendente dell' affaire Bonolis è stata la salomonica intervenzione del Cavaliere. Se non fosse Presidente del Consiglio, sarei anche d'accordo. Si occupa dell' azienda, e tutti contenti. Ma il problema è che Berlusconi si debe occupare più dell Italia che di Mediaset. Ok, la ditta è sua, ma restiamo seri.

Resta quindi solo Celentano per ricordare a Berlusconi che debe pensare a governare, e non tanto a evitare che la testata sportiva faccia fuori un showman senza troppo umorismo. Per quello, ci sono i carabinieri. A pensarci due volte, fa un paura, sto Celentano...

Fra il Cavaliere e il recentemente rieletto sindaco di New York, Michael Bloomberg, ci sono similitudini. Soldi, politica e partiti di destra. Fino a lì, tutto ok, ma Blomberg, senza rinunciare alla propia fortuna, ha saputo delegare i suoi affari in gente a lui vicina. Berlusconi sembra però ancora indispensabile per mettere Mediaset a posto. Spero tanto che la struttura dell'azienda non lo transformi in un elemento insostituibile. E altrettanto che Berlusconi si allontani da Mediaset. Permettersi addirittura un pò di autocritica, che dà sempre forza se fatta onestamente.

MIGUEL VINUESA.

Monday, November 07, 2005

CINE: LA VIDA SECRETA DE LAS PALABRAS

LA VIDA SECRETA DE LAS PALABRAS

España, 2005. C-122’. Drama. Directora. Isabel Coixet. Intérpretes: Tim Robbins, Sarah Polley, Javier Cámara, Sverre Anker Ousdal. Distr.: El Deseo. CE: Mayores de 18 años. VM: Adultos.

José Luis Panero

La realizadota catalana, Isabel Coixet (Demasiado viejo para morir joven, A los que aman, Mi vida sin mí), continúa sembrado con el drama verdaderas realidades sociales, en un clima áspero, pesimista y gris, como ya comprobamos con la fabulosa Mi vida sin mí.

La vida secreta de las palabras narra la historia de Hanna (Sandra Polley), enfermera refugiada de la guerra de los Balcanes, que acepta subir a una plataforma petrolífera en el mar del Norte, y agotar por fin unos días de vacaciones que nunca emplea, para curar las heridas que ha sufrido Josef (Tim Robins), temporalmente ciego, tras un accidente de trabajo.

Brillante filme con matices, la película de Coixet plantea el síntoma sobre la incomunicación y la soledad de manera notable. La relación que se fragua entre los protagonistas nos conduce hasta el vivo planteamiento sobre la necesidad de existir para saber valorar al otro; de saber que gracias al otro mi vida adquiere sentido. Argumentalmente, la película crece de manera progresiva y deja que se desarrolle un guión muy cuidado, aunque de menor calidad que el de su anterior película, la arriba citada Mi vida sin mí.

El reparto principal cumple a la perfección sus roles (atención a Javier Cámara), y la cineasta sabe cómo recrearse, rodando de manera muy íntima a cada uno de los personajes. Con una espléndida fotografía, y una banda sonora amarga, la historia -sin ser especialmente ingeniosa-, tiene auténticos diálogos ciertamente originales, que de nuevo confirman el talento de la directora, también para titular sus películas.

Sin embargo, todo este producto queda mermado por una distorsionada y difusa voz en off, que puede confundir al espectador, y por un reclamo gay muy particular, innecesario, soez, vulgar y ñoño que no tiene parte en la trama -ni en la subtrama, con la madre de la protagonista a la cabeza-, y que resta categoría a una película fiel a los sentimientos, al amor, a la redención y hasta a los mejores golpes de humor.

Nota del Editor: Por problemas técnicos publicamos el texto hoy lunes 7 de noviembre. Disculpen las molestias.